Trujillo, jul. 11. Los arqueólogos Santiago Uceda y Ricardo Morales presentaron en la Huaca de La Luna los resultados de sus recientes investigaciones realizadas en el citado complejo arqueológico, ubicado en la provincia de Trujillo, región La Libertad.
En la presentación mostraron dos murales con personajes tomados de la mano y un nuevo “tema complejo”.
También presentaron el hallazgo en una tumba ubicada en el núcleo urbano con un cetro en forma piramidal, muy semejante al que tenía el Señor de Sipán, hecho de cobre, orejeras de oro, instrumentos de cobre, cuentas de piedra, tres mandíbulas de felinos con garras forradas de metal, 10 vasijas de cerámica y un camélido ofrendado junto a los pies.
En el frontis norte de la huaca de la Luna, el codirector del proyecto Huacas del Sol y de la Luna, Santiago Uceda, afirmó que se maneja la hipótesis de que los objetos hallados en la tumba pertenezcan a un representante del Estado Mochica en otros territorios, probablemente Virú, Santa o Nepeña.
“Creemos que este representante haya sido enviado al primer estado territorial Mochica en los Andes. Estos objetos como centro, orejeras, tocados felinos con ojos y garras le dan un estatus muy elevado, tal vez el más alto descubierto en huacas del Sol y de la Luna”, declaró Uceda, al tiempo que informó que se espera el arribo de expertos internacionales para continuar con los estudios.
La tumba se ubica en el núcleo urbano entre la huaca del Sol y la huaca de la Luna, se calcula su antigüedad en el año 600 antes de Cristo. El responsable del grupo investigador es el arqueólogo Enrique Zavaleta y sus estudiantes. Luego pasó a manos del laboratorio a cargo César Córdova, restaurador.
En el lado este de la plaza ceremonial de la huaca de la Luna se puso al descubierto dos murales: el primero, corresponde al último edificio de huaca de la Luna y representa dos personajes tomados de la mano y un panel dividido en cuatro secciones con personajes del panteón mochica, el cual se asemeja al “tema complejo” o “mural de los mitos”.
La conservación de este mural no se encuentra en óptimas condiciones, pero se puede observar en el panel central al Dios de las Montañas, mientras que en el panel inferior, se observa una escena conformada por una forma escalonada, animales sagrados y diversos personajes del discurso litúrgico Moche.
El segundo mural, en tanto, fue identificado a partir de la limpieza de un pozo de huaqueo, correspondiente a un muro asociado al penúltimo edificio de huaca de la Luna. Se trata de paneles pintados en dos secciones: una de color blanco y la otra con diseños de olas con escalonados y triángulos con la “manta raya”.
Este nuevo hallazgo resulta importante, pues –según se explicó- permite comprender cómo funcionaban los rituales al interior de la plaza principal. En el caso de esta arquitectura, habría funcionado como un espacio controlador para poder acceder a la rampa principal del templo; la misma que conduce al altar mayor en la que se realizaba la ceremonia de la presentación de la copa conteniendo la sangre del guerrero sacrificado.