Sao Paulo, jun. 10. Los trabajadores del Metro de Sao Paulo, uno de los más importantes medios de transporte de la ciudad, decidieron levantar una huelga que mantenían hace cinco días, que provocó caos en la ciudad y que amenazaba con afectar el buen desarrollo del Mundial que se inicia este jueves.
“Volvemos al trabajo ahora, pero tendremos una nueva asamblea el 11 (miércoles) por la tarde. Si retomamos o no la huelga el 12 (cuando comienza el Mundial) dependerá de la reintegración de los (42) trabajadores despedidos (por la medida de fuerza)”, dijo el presidente del sindicato de trabajadores del metro de Sao Paulo, Altino Melo dos Prazeres.
Los trabajadores volvieron inmediatamente a trabajar, “por respeto al pueblo de Sao Paulo”, aseguró el dirigente.
Esta ciudad de 20 millones de habitantes es la sede del partido inaugural de la Copa del Mundo, donde unos 61,000 hinchas asistirán al estadio Arena Corinthians, aún en obras, y en donde el metro, que transporta diariamente a 4,5 millones de personas, es esencial para llegar, destaca la Agencia France Presse.
Doce jefes de Estado y de gobierno, además del secretario general de la ONU Ban Ki-moon, confirmaron también su asistencia.
La medida de fuerza en demanda de un incremento salarial, fue declarada ilegal por la justicia, que además impuso fuertes multas al sindicato, mientras que el gobernador del Estado de Sao Paulo, Geraldo Alckmin, había advertido que quien no regresara al trabajo podría perder su empleo, lo que finalmente ocurrió.
Ante ello, el sindicato exigió la reposición de los despedidos, lo que estableció como condición para no retomar la huelga.
“Si el gobierno reintegra a nuestros 42 compañeros, no tendremos huelga el día 13”, aseguró Melo dos Prazeres.