Lima, mar. 27. Pepe Vásquez partió en olor de multitud, acompañado por un mar de gente que le interpretó a capela “…no es más que un breve adiós” de su famoso “Jipi Jay”, envuelto en la bandera del Perú y del club de sus amores, Alianza Lima.
El cantante criollo, que falleció a la edad de 52 años, 10 días después del nacimiento de su quinto hijo Príamo, fue sepultado en el nivel 4 del pabellón San Marcos, en el cementerio Parque Eterno del populoso distrito de El Agustino.
El féretro color marrón ingresó en hombrosal camposanto, mientras numerosos familiares, amigos y público lo recibieron con jarana y aplausos que parecían eternos.
Se pudo apreciar a sus hijos mayores, quienes llorando despidieron al padre criollo. No obstante, la jarana pudo más, la tristeza dio paso al cajoneo, al toque de la guitarra y a las voces que empezaron a cantar la música que ha envuelto ya en un manto de leyenda a Pepe Vásquez.
Cientos de amigos, familiares y admiradores desfilaron ante el féretro para rendir tributo al ícono de la música afroperuana, compositor de temas como No Valentín, el Jipi Jay, Mamá y otros más que a decir de sus seguidores continuará interpretando en el cielo junto a su padre Porfirio Vásquez y los grandes criollos que lo precedieron.
El cantante falleció a las 6.45 p.m. del martes 22 de marzo, producto de una septicemia. EsSalud informó que murió por una falla orgánica multisistémica, a consecuencia de la diabetes que padecía.
Vásquez había ingresado al Servicio de Emergencia General del Hospital Nacional Edgardo Rebagliati Martins, de EsSalud, el lunes último a causa de un shock séptico.