Sábado, 21 de Diciembre del 2024
La costumbre de lucir una piel bronceada en el verano puede pasarnos una factura muy cara, como el riesgo de sufrir el temible cáncer de piel debido a la exposición acumulativa a los rayos ultravioleta sin tomar las medidas de protección necesarias. Cicatrices desfigurantes por el tratamiento contra el cáncer o hasta la muerte, son las consecuencias.
Así lo advirtió el doctor Manuel del Solar, dermatólogo de Solderma Instituto Dermatológico y profesor de la Universidad Peruana Cayetano Heredia, quien explicó que el cáncer de piel ocupa hoy en día el cuarto lugar dentro de las formas de cáncer que afectan al ser humano en nuestro medio, mal que ha ido escalando posiciones, y por el cual ya no es raro encontrar personas menores de 30 años con esta enfermedad.
De allí que la cultura de prevención es de vital importancia, insiste el doctor Del Solar quien destacó la importancia de usar en este período del año donde la piel se daña, se lastima y se reseca, productos que renueven e hidraten nuestra epidermis como los de la línea Dermacontrol de Cetaphil.
Tipos de cáncer de piel
“Dentro de los tipos de cáncer de piel tenemos el más común, el carcinoma basocelular, no es el más agresivo pero requiere tratamiento quirúrgico que deja cicatrices en la piel. Luego está el carcinoma epidermoide, que puede generar enfermedad severa si no se detecta a tiempo, generalmente afecta la cara, la zona de los labios, la nariz y las orejas, y puede extenderse a otros órganos (metástasis). También requiere de intervención quirúrgica”.
El especialista médico añadió que la forma más grave de cáncer es el melanoma, pues si no se detecta a tiempo puede matar. “Para evitar estos problemas es muy importante la fotoeducación que promueve una adecuada fotoprotección a través del correcto uso de bloqueadores solares, entre otras medidas, no solo en el verano sino durante todo el año porque la radiación ultravioleta es permanente, solo varía la sensación térmica”.
También advirtió que las personas con muchos lunares o manchas en la piel deben tener mayor cuidado con las quemaduras solares, pues no necesitan de una acumulación de radiación solar sino que puede bastar con una quemadura aguda, violenta, en un momento determinado, para despertar o activar un melanoma que estaba escondido.
“Por otro lado, la resequedad de la piel no solo es cuestión de aspecto o cosmética, sino que una piel seca y resquebrajada es pasible de infectarse porque facilita el ingreso de agentes biológicos como bacterias, hongos y virus, así como otros elementos que pueden generar alergias e inflamación”, alertó el dermatólogo.
Para hacer frente a la fuerte radiación solar recomendó, además de usar bloqueadores de calidad, consumir una dieta con mayor cantidad de frutas y verduras, beber abundante agua, el uso de lentes con protección UV y sombreros de ala ancha, y procurar no exponerse al sol sin protección entre las 10 de la mañana y las 3 de la tarde.
