Barack Obama ratificó la ley desde Honolulu (Hawai), donde se encuentra descansando con su familia, después de que la Cámara de Representantes y posteriormente el Senado aprobaran un plan de gastos y ahorros que se ha resistido desde 2009. La firma de la ley cierra un año de sinsabores para Obama, que ha visto cómo se atascaba la reforma migratoria y se complicaba la puesta en marcha de la ley sanitaria y cómo los desacuerdos entre demócratas y republicanos abocaron al país a 16 días de parálisis administrativa en octubre.