Jueves, 25 de Abril del 2024 
Lima, nov. 29 . El violinista estadounidense Tim Fain será el solista invitado al concierto que la Orquesta Sinfónica Nacional brindará hoy viernes 29, a las 20.00 horas, en el Gran Teatro Nacional, bajo la batuta del director Edward Carroll.
Este concierto forma parte de la Temporada Internacional de Primavera 2013 del elenco artístico del Ministerio de Cultura.
La velada se iniciará con el poema sinfónico Sensemayá, de Silvestre Revueltas, una composición basada en el verso homónimo del vate cubano Nicolás Guillén, que toma de este el metro (compases amalgamados de 7 pulsos) y el carácter hipnótico y ondulante de la cacería de la serpiente a la que hace alusión.
El violinista Tim Fain ingresará al escenario del Gran Teatro Nacional inmediatamente después de esta interpretación, para tocar junto a la Orquesta Sinfónica Nacional la obra musical Romance Op. 11 de Antonín Dvorák, además de Introducción y rondó caprichoso de Camille Saint-Saëns.
Graduado del Instituto de Música Curtis en Filadelfia, Fain apareció en pantalla grande en la banda sonora de la película “Cisne negro” y puso música al violín de Richard Gere en “La huella del silencio”.
Fue solista con el Ensamble Philip Glass en el Carnegie Hall, en una versión de concierto de Einstein on the Beach, y ha visitado diferentes ciudades con dicho artista, entre las que se encuentra recientemente Lima.
Él y la Orquesta Sinfónica Nacional serán dirigidos en esta oportunidad por su compatriota, el trompetista, director de orquesta y maestro de talla internacional Edward Carroll, quien se desempeña en la actualidad como profesor de trompeta y coordinador de Estudios de Viento Metal en el Instituto de Artes de California y como profesor titular de la Universidad de Dartmouth.
La presentación finalizará con la Sinfonía N.°4 de Piotr Illych Tchaikovksy, que el compositor ruso dedicó a su mecenas, Nadezhda von Meck, y que describió como una tensión permanente entre los deseos, ensueños, recuerdos de un pasado mejor y anhelos futuros contra el ineludible destino.
