Washington DC, nov. 14 . Cualquier intento por llevar adelante la reforma migratoria en Estados Unidos este año, quedó descartado por el vocero de la Cámara de Representantes, el republicano John Boehner, informó la cadena CNN en Español.
El congresista repitió su conocida oposición a la iniciativa sobre inmigración aprobada por el Senado y su promesa de que la Cámara de Representantes nunca la votará, aunque en esta ocasión fue más lejos al dibujar una línea clara: “Lo dejaré claro, no tenemos ninguna intención de discutir el proyecto de ley del Senado”.
La semana pasada el representante de California, Whip Kevin McCarthy, dijo a los defensores de la reforma inmigratoria que no había tiempo suficiente este año para que la Cámara de Representantes la discuta.
La Cámara estará sesión en 15 días desde ahora hasta que termine el año.
Luego de que los republicanos perdieron la elección presidencial en el 2012 y de que los hispanos votaron en masa por el presidente Barack Obama, Boehner dijo que es era hora de que el Congreso aprobara una reforma mayor de migración.
“Pienso que desde hace tiempo hay un enfoque integral. Confío que el presidente, yo, y otros podamos encontrar un terreno común para hacernos cargo de este asunto de una vez por todas y para siempre”, aseguró Boehner en una entrevista con ABC News una semana después de la elección.
Al enfrentar divisiones sobre el asunto, Boehner insiste en que todavía quiere aprobar una legislación pero que se tiene que hacer por partes.
Una serie de iniciativas, la mayoría sobre temas de seguridad fronteriza, fueron aprobadas por el Comité Judicial de la Cámara, pero los republicanos no han programado votar ninguna de ellas.
Un considerable bloque de representantes conservadores se opone rotundamente a cualquier medida que provea un camino a la ciudadanía o que dé un estatus legal a 11 millones de trabajadores indocumentados en los Estados Unidos.
“Se trata de hacer esto de una forma que el pueblo estadounidense y nuestros miembros puedan absorberlo”, dijo Boehner, y agregó que la reforma migratoria es demasiado compleja para apresurarse.
“Hay cientos de asuntos involucrados al lidiar con la reforma inmigratoria, y tenemos que lidiar con ellos con sentido común para que nuestros miembros y electores entiendan lo que estamos haciendo”, anotó.