Santiago, nov. 08 . Tras meses de análisis de los restos de Pablo Neruda, el director del Servicio Médico Legal (SML) de Chile confirmó que la causa de muerte del poeta fue debido al cáncer de próstata que padecía, descartando así las versiones de envenenamiento, informó el diario El Mercurio.
La muerte de Neruda, ocurrida en setiembre de 1973, se desencadenó por la enfermedad oncológica que sufría y por el que estaba siendo tratado en la Clínica Santa María días antes de su muerte.
Así lo establecieron los exámenes toxicológicos analizados en Carolina del Norte, en Estados Unidos, y en la Universidad de Murcia, en España, que determinaron la inexistencia de sustancias químicas en el cuerpo del vate, y por tanto, descartaron la hipótesis del envenenamiento.
“Se confirma por diversas técnicas complementarias entre sí la existencia de lesiones metastásicas diseminadas en varios de los segmentos del esqueleto en justa correspondencia con la enfermedad por la que estaba siendo tratado el señor Pablo Neruda”, señala una de las conclusiones del informe dado a conocer por el director del SML, Patricio Bustos, en el Auditorio de los tribunales de Familia de Santiago.
Dichos peritajes fueron solicitados por el ministro chileno Mario Carroza, en el marco de la investigación para esclarecer si el poeta falleció producto de la enfermedad que padecía o bien por una sobredosis de medicamentos, como sostenía su exchofer Manuel Araya.
El cuerpo del escritor fue exhumado en abril luego que Carroza, tras revisar los informes de especialistas de la Universidad de Chile y del SML, concluyera que era factible realizar dicha diligencia a pesar del tiempo transcurrido.
Las dudas sobre la causa de muerte del Premio Nobel surgieron luego que su exchofer sostuviera que tenía sospechas de que Pablo Neruda podría haber sido envenenado cuando estuvo internado en la Clínica Santa María.
Por lo anterior, el magistrado ordenó tomar contacto con los médicos que atendieron al poeta durante su paso por el recinto hospitalario, además de una serie de declaraciones que incluyó el testimonio del médico cirujano Sergio Draper Juliet (70), quien estuvo a cargo del tratamiento que siguió Neruda antes de su muerte.
En tanto, las pruebas realizadas en el país por el SML a los restos del premio Nobel ya habían confirmado que el poeta -efectivamente- padecía de un cáncer de próstata avanzado.