Este miércoles 6 de noviembre a las 7:30 p.m. el destacado mimo italiano Sergio Procopio en el Teatro Pirandello (Av. Alejandro Tirado
274, Santa Beatriz) presentará “La Espera” a beneficio de la Fundación Mato Groso.
“La espera” nos lleva a la sala de un aeropuerto, donde Sergio está por tomar un vuelo y en donde se dan una serie de eventos sumamente
graciosos, que hará que los espectadores no dejen de reír.
SOBRE SERGIO PROCOPIO
Sergio Procopio se acerca al claun en 1975 cuando entra al colegio Salesiano de Arese donde encuentra a Don Vittorio Chiari e Bano
Ferrari. Ellos se convirtieron en sus principales maestras tanto para la vida como en el teatro. Sergio participa en 1077 en la creación de
la compañía teatral “I Barabbas Clown”. Con esta compañía por 12 años, participa en más de 1800 representaciones en Italia y participa en
numerosos festivales internacionales. En 1989 con I Barabbas, se presenta en El Vaticano frente a Juan Pablo II.
Desde 1990 inicia su carrera en solitario apoyado por el director teatral Carlo Rossi y funda la compañía teatral Sergio Procopio que
cuenta con 18 espectáculos en su repertorio y ha realizado 2000 presentaciones.
Para consolidar su formación Sergio ha tomado lecciones con el suizo Pierre Bayland y con Marcel Marceau, considerado seguramente el más
grande mimo de todos los tiempos.
Sergio se ha presentado en Bélgica, Francia, Alemania, España, Suiza, Madagascar, Brasil y Perú, donde en octubre de 2006 se presentó en el
Museo de la Nación
SOBRE LA OPERACIÓN MATO GROSSO
La Operación Mato Grosso es un movimiento creado en Italia hace más de 40 años por el p. Hugo de Censi , en la que se propone a los jóvenes
hacer el trabajo gratuito y así poder ayudar a los pobres; en la actualidad nos encontramos en Brasil, Ecuador, Bolivia y Perú; y en
nuestro país estamos desde el año 1976 y contamos con algo de 70 casas de misión ubicadas en las regiones de Ancash, Huánuco, Cajamarca,
Apurímac; Cuzco y Lima; buscamos que los jóvenes tengan la posibilidad de estudiar una carrera que les permita salir de la pobreza, lo cual
es una realidad con los cientos de talladores de madera, tejedoras, enfermeras, artesanos de la piedra y metal, vitralistas, andinistas,
restauradores, mecánicos, entre otras especialidades que ya han salido de nuestros centros.En dichas casas de misión acogemos en forma de
internado a niños pobres de la zona y se les da educación, alimento, ropa y los materiales que requieran en forma totalmente gratuita ,en
función a su extrema pobreza