Madrid, abr. 26 . La policía reprimió y disolvió por la fuerza a cerca de 2 mil manifestantes que congregaron frente al Congreso de los Diputados, para exigir la renuncia del gobierno de Mariano Rajoy, quien hoy anunciará una serie de recortes y el incremento de impuestos.
Con disparos al aire de balas de fogueo, cientos de agentes antidisturbios avanzaron sobre los manifestantes que llevaban más de dos horas realizando una protesta pacífica frente a la Cámara baja, y quienes respondieron arrojando botellas y palos.
“Ustedes tienen trabajo, nosotros no”, coreaban los ciudadanos allí concentrados dirigiéndose a la policía el mismo día en que España recibió la noticia de que el desempleo escaló en el último trimestre hasta los 6,2 millones de personas, el 27% de la población activa.
La protesta tuvo lugar en un momento en el que la tensión social está creciendo en respuesta a las medidas neoliberales y antisociales del Ejecutivo de Rajoy, del derechista Partido Popular (PP).
“Vergüenza” o “Asesinos a sueldo, abuso de poder”, eran algunas de las consignas lanzadas a los agentes en medio de los incidentes y mientras los participantes de la protesta eran perseguidos por las calles de Madrid.
Como en anteriores ocasiones, la policía avanzó en grupo y persiguió a los manifestantes forzándolos a desplazarse varias cuadras, por el Paseo del Prado hasta la Estación de trenes de Atocha y hacia otros puntos del centro de la capital.
Los manifestantes que intentaban llegar desde Cibeles a la Plaza del Sol por la calle Alcalá se enfrentaron con piedras contra la policía y los intentaba contener ya entrada la noche.