La razón por la que el gobierno se une al pleito se debe a que hace una década el exciclista pertenecía al equipo U.S. Postal, de patrocinio gubernamental, por lo que alega que el deportista ha cometido fraude contra el Ejecutivo estadounidense por violar las reglas estrictas contra las drogas ilegales.
Armstrong aceptó la acusación de la USADA de haber participado en un programa sistemático de dopaje, lo que lo llevó a perder sus logros deportivos, incluyendo sus siete Tours de Francia y la medalla de bronce ganada en los Juegos Olímpicos de Sydney 2000.
El gobierno había indicado que presentaría con toda probabilidad una acción legal. Los nombres de el director del equipo, Johan Bruyneel, y Tailwind Sports LLC, aparecen como los acusados.