Como todos los años los estudiantes regresan a las aulas para ser el futuro del país, para ello requieren un desayuno y lonchera que les dote de energías, proteínas y vitaminas para un buen desempeño escolar como lo dice el Colegio de Nutricionistas del Perú.
Es por ello, que la ASPAN, Asociación Peruana de Empresarios de la Panadería y Pastelería, comunica que 18 mil panaderos artesanales a nivel nacional, todas las madrugadas los 365 días del año estarán elaborando su pan. Alimento noble, elaborado con ingredientes nobles y mano de obra noble. Que es uno de los mejores alimentos y el más antiguo de la humanidad.
18 mil panaderías desde las 6 am estarán exhibiendo en sus vitrinas panes frescos y de toda variedad, para todos los gustos y precios como por ejemplo: pan francés, de yema, integral, chiabbatta, chiabbatta integral, pan con quinua, pan con Kiwicha, pan con maíz, con camote, entre otros.
El Perú tiene un bajo consumo per cepita de pan de 30 kg. Siendo Chile 85 kg. Y Argentina 75 kg. países donde la desnutrición es mucho menor que la nuestra (Centro Nacional de Alimentación y Nutrición – CENAN).
La OMS (Organización Mundial de la Salud) recomienda consumir 250 grms de pan al día Nutritivo) y el INEN, Instituto Nacional de Enfermedades Neoplásicas, aconseja que este pan sea preferible integral, debido a que previene enfermedades neoplásicas por su mayor contenido de fibra (preventivo).
El Colegio de Nutricionistas del Perú resalta el aporte del pan en el desayuno y en las loncheras escolares, debido a que los complementan brindando la energía que se requiere para un desarrollo cognitivo adecuado y el desarrollo de las actividades físicas en la escuela. Para asegurar la nutrición, llevar desde su hogar refrigerios para no depender del quiosco colegial.
ASPAN invita al público a que los panes sean comprados directamente de sus panaderías para asegurar la procedencia formal y así prever contaminación al manipularlos de un lugar a otro. El peso debe variar entre 35 y 40 grms por pieza exigiéndole al panadero su respectivo comprobante de pago, contribuyendo con los tributos del Estado.
Foto: Javier Espichan Gambirazio