La ceremonia de los Oscar celebrada el domingo registró la mayor audiencia televisiva en tres años y el nuevo presentador Seth MacFarlane ayudó a impulsar el interés de los jóvenes, pese a ser atacado por los críticos de televisión.
Los datos de audiencia de Nielsen mostraron el lunes que 40,3 millones de estadounidenses vieron la ceremonia de premios de la Academia de Hollywood en la televisión ABC, un tres por ciento más que en 2012. ABC dijo que fue la mayor audiencia de los Oscar en tres años.
Impulsada por una recaudación récord en taquilla y la intriga sobre el debut de MacFarlane como presentador de los Oscar, el espectáculo aumentó un 11 por ciento la franja de audiencia comprendida entre 18 y 49 años, la más codiciada por los anunciantes, y en un 34 por ciento la de hombres entre 18 y 34 años, comparado con 2012.