El país sabe de certámenes de belleza en su máxima expresión mundial. Y con derecho propio, se inició en 1,957 cuando nuestra Gladys Zender se coronó “Miss Universo” para orgullo de todos los peruanos. Desde aquella fecha histórica, han desfilado y deslumbrado en pasarelas internacionales, notables mujeres con belleza sin par.
Sus encantos no quedaron allí, sino emprendieron caminos paralelos, convirtiéndose en exitosas empresarias. Este es el caso de Marina Mora, la brillante ex-“Miss Perú Mundo 2,002”, la hija predilecta de Guadalupe, La Libertad. Hablamos con ella para mostrarnos lo bien que le va en su fascinante “glamour”.
-Marina, ¿sigues pendiente de los certámenes de belleza?
“Siempre estoy pendiente de los concursos, reinados, dentro y fuera del país. Hay motivaciones suficientes, como para aportar alcances positivos en su producción y, por la coyuntura en calidad de empresaria. Por supuesto celebro por todo lo alto, cuando una representante nuestra logra títulos en el exterior.”
-Básicamente, ¿a dónde apunta tus tiempos?
“Consolidando mi línea de productos “Bellísima”. Es una organización con alianza internacional, cuyo catálogo se comercializa con exigentes estándares de calidad. Para lo cuál lo implementamos con frecuentes ciclos de capacitación, eventos y talleres.”
-Y por estos días, ¿cuáles son esas novedades?
“Estamos por inaugurar un bonito taller en San Isidro y la ampliación en el Hotel Sheraton. Aquí vamos a enseñar con lujo de detalles, sobre las caracterizaciones, maquillajes, tanto para el cine, teatro y televisión. Es decir, vamos a contribuir para que los artistas y figuras brillen más.”
-Entonces, ¿cómo manejas tu organización?
“Con un selecto personal y trabajo en equipo, integrado incluso con familiares, soporte fundamental para el éxito de “Bellísima”.Todos estamos inmerso en esta feliz propuesta.”
-¿Cuál seria tu oportuno consejo para quienes sueñan con una corona?
“Primero, que estén seguras, que esto no es fácil, frívolo, sino se trata de una incursión sería, llena de responsabilidades. Para lo cual, tienen que prepararse bien` y, en lugares serios. En los certámenes de belleza nada es improvisado, no basta tener figura y cara bonita.”
-Por tu lado, ¿cómo van los cuidados en cuerpo y alma?
“Ja,ja,ja. Me cuido mucho todos los días. Siempre paro en “treinning”, idas y vueltas por razones de mis múltiples obligaciones, gracias a Dios, los comparto bien. Por supuesto hay regímenes de alimentos y persistentes horas de ejercicios, hay que predicar con el ejemplo. Y por encima de todo, vivir en Paz.”
-A propósito, te casaste joven. ¿Cómo está ahora el corazón?
“Gracias a Dios, estoy muy tranquila. Por ahora, vivo momentos felices, sin complicaciones sentimentales. Tengo el corazón contento.”
Así está Marina Mora, dinámica, ejecutiva, ligada a lo que más sabe y ama, el mundo de las pasarelas. Realmente sus logros no son casualidad, le está costando y lo más importante contribuyendo en la cantera de bellezas peruanas. Bien por ella.
Por Marcos Mendoza