Fue uno de los baluartes en el empate contra Argentina. Y volvió a la selección con las mismas características con que asomó en Cristal, es decir desdoblándose con potencia y generando peligro de gol. Su buen momento futbolístico lo toma con humildad y el pleno reconocimiento a su familia. Es Luis Advíncula, el moreno que un día salió del Callao para escribir su propia historia dentro y fuera del país.
-Lucho, ¿un año redondo para ti?
“Así parece, pero tengo que consolidar mi trabajo para sumar en la selección y en Cristal”
-¿Cómo tomas lo sucedido ante Argentina?
“De la mejor manera y contento, porque se colaboró en el gol, se dio las indicaciones del profesor Markarian para el gol de Zambrano.”
-Y estuviste en lo tuyo, desbordando.
“Ese es mi perfil, encarar con firmeza y buscando el gol si es posible. Esto no es de ahora, me siento bien jugar así.”
-¿Por dónde vas mejor, lateral derecho o izquierdo?
“Soy muy respetuoso y obediente con las indicaciones técnicas. Ahora frecuento la banda derecha y creo lo estoy haciendo bien.”
-Ahora a jugar en la altura
“Donde nos toque, tenemos que sumar los 6 puntos, ese es el ideal. No tengo complicaciones de jugar en La Paz, ya lo hice, entonces a volver con normalidad.”
Tiene razón Luis Advíncula, porque recordamos cuando se “comió” la cancha en Ayacucho, ante Inti Gas vistiendo la celeste. Tremendo gol que se metió. Ojalá se repita en canchas bolivianas.
-¿Quién te enseñó a jugar así?
“Todo se lo debo a mi papá Lucho, porque en todas las circunstancia me apoyó, fue el primero que confío en mi. Y también mi agradecimiento a los técnicos que me enseñaron oportunamente.”
-Luis. ¿cuánto significa Cristal en tu carrera?
“Es mi casa, el punto de partida de mi carrera. El apoyo del club me permitió llegar a la selección. Estoy muy agradecido a esta gran institución.”
-¿Te han hablado sobre posibles contratos?
“Por ahora, mi mente está en Cristal, seguir jugando hasta conseguir el título, luego iré a Ucrania para cumplir el contrato, eso lo tengo claro.”
Mientras nos atendía, Lucho firmaba autógrafos con visible alegría, demostrando sencillez y aprecio a los aficionados. Nos consta esta actitud del lateral rimense.
-¿Cuánto pesa jugar por la selección?
“Creo que es una sagrada responsabilidad. En lo personal me cuido mucho y escucho a mi familia, para que complicarse la vida.”
Lo dijo con transparente seriedad, porque siente la felicidad de ser padre y buen hijo.
-Lucho, ¿que nos dices sobre el penal fallado de Pizarro?
“Primero, que en camarines no se dijo nada, lo tomamos con tranquilidad. Sostengo una vez más que el equipo está unido y, por favor que no se especule tantas cosas al respecto.”
Es la sinceridad de Lucho Advíncula, ahora un marcador derecho consolidado, como dicen los críticos especializados, aterriza bien la pelota. Y con derecho propio se ganó el titularato.