Una tradición fue rota en Londres. La llama olímpica fue apagada para poder trasladar al pebetero hasta su nuevo lugar en el Estadio Olímpico.
La llama olímpica fue conservada en un farol durante el traslado del pebetero a su posición definitiva. El pebetero, formado por 204 pétalos en representación de los países participantes en los Juegos, vuelve a contener la llama desde las 7.00 horas de hoy.
La ubicación del pebetero ha sido objeto de polémica porque, por primera vez en la historia reciente de los Juegos, no se ve desde fuera del estadio.
El presidente del Comité Organizador de Londres 2012 (LOCOG), Sebastian Coe, aseguró este domingo que el pebetero “no se creó como una atracción para turistas”.