El príncipe Guillermo de Inglaterra, que hoy cumple 30 años, recibirá una herencia de 10 millones de libras (12,4 millones de euros) de su madre, Diana de Gales, fallecida en 1997, según informan los medios británicos.
La princesa de Gales dejó buena parte de su fortuna a sus hijos Guillermo y Enrique, que tenían 15 y 12 años cuando murió en un accidente de automóvil en París en 1997, pero los albaceas habían establecido que las herencias no les serían entregadas antes de cumplir 30 años.
Diana dejó una herencia de 12.9 millones de libras ($20.2 millones de dólares), pero se estima que la suma ha aumentado a cerca de 20 millones de libras (más de 31 millones de dólares) gracias a las inversiones realizadas. Guillermo y Enrique recibirán cada cual la mitad de esa herencia.
Desde su boda el año pasado con Catalina Middleton, duquesa de Cambridge, las cabeceras del Reino Unido habían especulado con la posibilidad de que el príncipe destinase el dinero de la herencia a comprar una residencia en el campo, en la que formar una familia.
Sin embargo, portavoces de la Casa Real se apresuraron a subrayar que la herencia no supondrá “un cambio visible en el estilo de vida del príncipe en las próximas semanas o meses”.
“Se especulaba que los duques de Cambridge construirían una casa pero no hay ningún plan en ese sentido”, afirmó un portavoz de la Familia Real británica al diario “The Daily Telegraph”.