El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, abandonó las críticas a su predecesor George W. Bush este jueves, cuando ambos se reencontraron en la Casa Blanca para desvelar los retratos oficiales del expresidente republicano y su esposa Laura Bush.
“Quizá tengamos opiniones políticas diferentes pero la presidencia trasciende estas diferencias. Todos amamos a este país. Todos queremos que Estados Unidos salga adelante”, declaró Obama durante la presentación de los retratos oficiales de Bush y su esposa Laura que adornarán la Casa Blanca, mencionó AFP.
Obama, en campaña por su reelección, no pierde oportunidad de subrayar que heredó una situación económica catastrófica a su llegada a la Casa Blanca el 20 de enero de 2009, pero este jueves prefirió hacer hincapié en el esfuerzo del gobierno saliente republicano para que “la transición se hiciera de la mejor manera posible”.
“Siempre estaré agradecido por esto”, aseguró Obama a Bush, caracterizándolo como alguien que “transmitió una resolución y una fuerza extraordinaria” a los estadounidenses desde las ruinas de las Torres Gemelas poco después del atentado del 11 de setiembre de 2001.
“Dicen que no se puede entender realmente lo que es ser presidente antes de sentarse detrás del escritorio y de sentir el peso de la responsabilidad por primera vez. Es verdad”, agregó Obama para quien, “ninguna decisión es fácil, ninguna elección es gratuita”, en este puesto.
Obama también agradeció a Bush, en tono de broma, por haberle dejado “un buen paquete de canales deportivos”.