Piermario Morosini, de 25 años, cayó sobre el terreno de juego durante la primera mitad del partido que enfrentaba a su equipo, el Livorno, contra el Pescara. El joven jugador recibió tratamiento médico en el mismo campo de fútbol y posteriormente fue trasladado al hospital, donde falleció.
Como reacción, la Federación Italiana de Fútbol (FIGC) decidió suspender todos los partidos de todas las divisiones en Italia.
Así lo anunció el director general de la FIGC, Antonello Valentini, quien indicó que esta medida entra en vigor este mismo sábado, empezando por el encuentro de Primera División (Serie A) que el Milán, segundo en la tabla, tenía previsto disputar en su estadio San Siro contra el Génova.