La familia real Qatar pagó US$ 250 millones por “Los jugadores de cartas”, obra emblemática del pintor francés.
Si bien no siempre se dan a conocer públicamente los valores que se desembolsan, se especula que la creación del “padre de la pintura moderna” -como es conocido Paul Cézanne- supera en US$ 106 millones al anterior récord. En aquella oportunidad se habrían pagado US$ 144 millones por una realización de Jackson Pollock.
La intención de los compradores es la de insertar a Doha como una de las capitales del arte, a la altura de Nueva York y de París. Obras similares a la que adquirieron en 2011 se encuentran en el museo MOMA de la metrópoli estadounidense y en d’Orsay de la capital francesa.
El Museo Nacional de Qatar parece que será el destino que tendrá la obra. En el recinto asiático ya se encuentran pinturas de Andy Warhol y Mark Rothko. La estrategia de las autoridades también incluye la solicitud para obtener las franquicias del Louvre y del Guggenheim.
La obra partencia a los herederos del millonario griego Yorgos Embiricos, que falleció en 2011, y que comenzó la negociación, pero no llegó a finalizarla.