VERNIS HERNANDEZ tildó como “lágrimas de cocodrilo” al ver llorar a Génesis Tapia por ser catalogada como la amante del Carlos Gonzáles, dueño de la discoteca TUMBAO, pues la cubana afirmó estar soltera y no tener inconveniente de estar junto a la bailarina el VIERNES 16 DE DICIEMBRE en la inauguración del TUMBAO SUR.
“No me he coludido con ‘Peluchín’ para que la tilde de “dama de compañía”, esa es su opinión como de muchas personas. Vi que se puso a llorar pero esas lágrimas de cocodrilo son porque cada uno sabe en qué se mete y sabe las consecuencias de sus actos. Si la llamé “sonsa” es porque me parece ilógico que diga que no sabía que Carlos y yo somos pareja cuando toda persona que está metida en la farándula lo sabe y si se tomó a pecho lo de “sonsa” es su problema, eso sí, yo sonsa no soy”, expresó Vernis.
Ante las imágenes que presentó ‘Magaly Teve’ donde el dueño de la discoteca TUMBAO sube a su camioneta con una señorita que al parecer podría ser Génesis, Vernis respondió: “No puedo dar una opinión porque no sé ve nada pero si está pasando algo entre ellos no me interesa lo hagan. Esas imágenes son cuando yo estaba en Cuba y aún seguía con Carlos, el 28 de noviembre que regresé de viaje y al escuchar esos rumores decidió cancelar mi matrimonio con Carlos, ambos ahora somos personas solteras”.
– Entonces, ¿Génesis ha sido la manzana de la discordia?
Yo solo digo que el 28 de noviembre mi relación se terminó y las imágenes fueron antes de ese día. La gente sacará sus conclusiones y verá de qué tipo de mujer estamos hablando. La señorita en vez de dejar entrever que hay algo entre ellos, es mejor que diga la verdad, a mi eso no me afecta porque Carlos es una persona soltera al igual que yo, pero seguiremos trabajando juntos y el VIERNES 16 DE DICIEMBRE estaré en la inauguración del TUMBAO SUR así este ella porque es mi centro de trabajo y la empresa que le pertenece al hijo que tengo con Carlos, él sabe a quién contrata, no he puesto condiciones ni siquiera lo hice cuando pasó lo de Cindy Marino. No la voy a botar, sería absurdo.