La actriz Paz Vega hizo que miembros de la localidad sevillana de Gerena estallen de indignación luego de ver las sugerentes fotografías en las que posó desnuda en una capilla.
La sesión fotográfica forma parte de un calendario de la marca alemana de galletas artesanales Lambertz.
Esta idea surgió gracias al ingenio de unos publicistas que pretendían mezclar el erotismo y la tradición religiosa, planteamiento que no ha resultado del agrado de los creyentes.
El desnudo ha levantado un mar de críticas dirigido tanto a Vega como a la marca y a los custodios de la capilla, pues estos fueron los que otorgaron los permisos necesarios para que la sesión pudiera ser llevada a cabo. La actriz española se mostró sorprendida por la polémica generada y señaló que no quiso ofender a la iglesia. “La sesión fue un homenaje a mi tierra y a sus tradiciones. Las fotos son muy bonitas, artísticas”, dijo.
Sin embargo, la Archidiócesis de Sevilla emitió un comunicado en el que expresa que las fotos “hieren la sensibilidad de los devotos de la patrona de Gerena y contraviene lo dispuesto por la legislación canónica para el uso de lugares sagrados”. La Hermandad de Nuestra Señora de la Encarnación de Gerena ha admitido que dio permiso para que la actriz Paz Vega fuese fotografiada en la ermita de la imagen, aunque aseguró desconocer que la actriz sevillana iba a aparecer desnuda en el reportaje.
En una breve intervención que ha sido difundida en varias ocasiones por la televisión local de Gerena, el secretario de la Hermandad admite que la empresa alemana recibió el permiso para realizar el reportaje gráfico en la ermita, pero asegura que se desconocía su contenido.
Afirmó que el caso se encuentra en manos de los asesores jurídicos del Arzobispado de la provincia de Sevilla y que recibió 250 euros por ceder la ermita, los cuales han sido donados a la obra social de Cáritas en el pueblo.