El primer atentado ocurrió en la Iglesia Santa Teresa, en el barrio Madala, ubicado en los suburbios de Abuja.
Otro ataque fue perpetrado cerca de una Iglesia en la ciudad de Jos, en el centro de Nigeria, donde murió un policía, fue destruido un muro del edificio y se incendiaron al menos tres vehículos.
La explosión se produjo en la zona de Rikkos, cerca de la Iglesia donde numerosos fieles asistían a una misa, dijo un testigo.
Un tercer atentado con explosivos ocurrió en una Iglesia cristiana en la ciudad de Gadaka, estado de Yobe, norte del país, donde según los primeros informes fueron numerosos los heridos.