Lima, dic. 27 . El Poder Ejecutivo oficializó hoy el cambio de denominación y nombramiento del nuevo presidente e integrantes de la Comisión de Alto Nivel encargada de poner en marcha el Lugar de la Memoria, que dará testimonio del periodo de violencia en Perú.
La nueva denominación será la de “Comisión de Alto Nivel para organizar y poner en marcha el Lugar de la Memoria, la Tolerancia y la Inclusión Social”, la que estará presidida por el ex ministro de Justicia y presidente de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, Diego García Sayán.
Además, integran este grupo de trabajo monseñor Luis Bambarén Gastelumendi, Pedro Alayza Tijero, Leopoldo Scheelje Martín, Javier Sota Nadal e Hilaria Supa Huamán, según un resolución suprema, publicada hoy en el Boletín de Normas Legales del Diario Oficial El Peruano.
La Comisión de Alto Nivel podrá designar un Consejo Consultivo y los grupos de trabajo que considere necesarios a los efectos de asesoría, con un enfoque plural, en distintos aspectos relativos a la organización y puesta en marcha de esta iniciativa.
La resolución lleva la rúbrica del presidente Ollanta Humala y es refrendada por el jefe del Gabinete, Óscar Valdés, y los ministros de Relaciones Exteriores, Rafael Roncagliolo; de Economía, Luis Miguel Castilla; y de Justicia, Juan Jiménez Mayor.
El Lugar de la Memoria es levantado en un terreno frente al circuito de playas de Lima, en el distrito de Miraflores y reflejará de manera amplia e imparcial la etapa de violencia que padeció el Perú en la década de los ochenta y noventa, que fue desatada por el terrorismo.
La Comisión de Alto Nivel deberá mantener un enfoque plural que atienda a la necesidad de documentar la diversidad de factores que estuvieron en la base del proceso de violencia, de recordar, reconocer y rendir homenaje a sus victimas civiles policiales y miliares.
Asimismo, crear un espacio abierto para convocar al diálogo permanente en materia de derechos humanos, acceso a la justicia y promoción de la inclusión y la tolerancia, que facilite las grandes respuestas de la sociedad para asegurar que la tragedia no se repita, señala uno de los considerandos de la norma.