Viernes, 17 de Mayo del 2024 
Ante la aparición de pacientes afectadas con cáncer luego de tener a los implantes PIP como rasgo común, el gobierno francés apeló a las ciudadanas a retirárselos inmediatamente. En países de América del Sur persiste la calma y los servicios de salud recomiendan realizarse chequeos inmediatamente.
La fábrica PIP (Poly Implant Prothèse) cerró en 2010 luego de una denuncia por usar silicona para aparatos electrónicos, la cual se rompía fácilmente.
Se sospecha que estos implantes podrían tener relación con ocho casos de cáncer registrados últimamente. Esta hipótesis será comprobada mediante un estudio, confirmaron. No obstante, pocos indicios demostrarían que el material sea la causa.
PIP ha vendido aprox. 300.000 siliconas. En Latinoamérica, los principales países afectados son Argentina, Brasil y Venezuela. Algunos países, como Colombia, están esperando las indicaciones del Ministerio de Salud francés: “A partir de ahí, estableceremos unas pautas para hacer las cosas con mucha calma y con mucha seguridad (…) Si resulta que las prótesis son malas, entonces examinaremos a cada paciente, con un estudio de resonancia magnética o una ecografía mamaria para ver si tienen alguna alteración en los implantes“, indicó Celso Bohórquez, vocero de la Asociación de Cirugía Plástica de Colombia.
En Brasil, se estima que las pacientes con PIP rondan los 25 mil: “La Sociedad de Cirugía Plástica de Brasil recomienda observar a los pacientes y quisiera advertir que ninguno de los casos de Francia guardan estricta relación con los implantes“, sostuvo José Horacio Aroubid.
Desde Venezuela, el cirujano plástico Jesús Alfaro aconsejó a las posibles afectadas hacerse un chequeo médico: “Estos implantes ya no se venden en Venezuela, aunque quienes aún los tienen deben ir a un especialista para que evalúe su estado. No están en peligro, pero deben mantenerse en observación“.
