Narra la historia de Svetlana Geier, una brillante y vital mujer octogenaria.
Siendo pequeña, su padre termina en uno de los campos de prisioneros de Stalin, entonces la joven Svetlana experimenta la invasión alemana. Para sobrevivir aprende alemán en su casa de Kiev y consigue trabajo como traductora antes de acabar en un campo alemán en 1943. Ahora, 65 años después, es una reconocida traductora que en sus años de crepúsculo ha traducido las grandes obras de Dostoevsky. Por primera vez en todos estos años, vuelve a Kiev, junto a su nieta.