Viernes, 22 de Noviembre del 2024
En una visita organizada por el Gobierno japonés, un pequeño grupo de periodistas pudo ingresar a la central por primera vez desde el terremoto y tsunami del 11 de marzo.
Goshi Hosono, ministro designado para supervisar la evolución de la puesta en funcionamiento de la central, acompañó a los reporteros en el recorrido de tres horas. Si bien los niveles de radioactividad se redujeron considerablemente, los visitantes debieron protegerse con trajes especiales.
La compañía que maneja la planta, Tokyo Electric Power (TEPCO), anunció en octubre que sería factible llevar a Fukushima a “parada cero” antes de que finalice el 2011.
Los pronósticos son favorables gracias a que ya se alcanzó el objetivo de llevar a menos de 100 grados Celsius la temperatura de la central.
Además de la zona que generó el máximo nivel de tensión, los periodistas pudieron visitar la base de operaciones desde la que se controlan los trabajos de limpieza del sector afectado. También pudieron acceder al campamento en el que se hospedan los trabajadores y los miembros de las Fuerzas de Auto Defensa, que se encuentra a 20 kilómetros de la zona de conflicto, según informó la agencia de noticias Kyodo.
Uno de los focos de conflicto y donde residieron las críticas hacia el Gobierno japonés fueron los medidores de radiación de la central. Los corresponsales pudieron verificar la zona y el funcionamiento de los equipamientos.
TEPCO aseguró, también, que disminuyeron los peligros y que mejoraron el confort de los trabajadores de la planta.
