El CEO de la compañía es el impulsor de la idea, destinada a “personas torpes o demasiado apegadas a su teléfono celular”.
El último grito de la tecnología son los airbags para smartphones. Será el fin de las caídas mortales para los dispositivos y los riesgos de perder información ante un accidente.
Jeff Bezos, CEO de Amazon, confió que su empresa patentó la idea original y que “muy pronto” comenzaría a comercializarlo.
De acuerdo con la patente, las bolsas de aire se activan cuando el smartphone detecta una caída a través de un radar o un láser que determine la distancia entre el teléfono y el suelo.
Una de las ideas es insertar una o más bolsas de aire pequeñas en el interior del teléfono, que se inflarían a través de un cartucho integrado de aire comprimido o dióxido de carbono si el dispositivo está en riesgo. El sistema de monitoreo podría detectar de qué lado el teléfono se cayó al suelo.
La presentación de la patente describe también un “elemento de propulsión”, que expulsaría gases para aterrizar más suave, señala el sitio GeekWare.
Bezos aseguró que esta invención le permitirá a cientos de personas ahorrar dinero, porque la mayoría de los seguros no cubre daños por caídas o roturas.