Miercoles, 15 de Mayo del 2024 
La Municipalidad Metropolitana invertirá un millón 500 mil nuevos soles en el proceso de formalización del comercio en Lima Cercado, este plan de tres años tiene como fin recuperar el Centro Histórico para los ciudadanos.
Explicó que este programa viene desarrollando un proceso de empadronamiento de los comerciantes para conocer los giros o rubros a los que se dedican, si están en condiciones de reconvertirse en otros negocios que permitan su formalización, si cuentan con el permiso municipal para desempeñarse en el giro que ofrecen al público, y si respetan las normas de respeto a las zonas intangibles.
“Lo que busca este programa es ordenar el comercio informal, pero también darles una alternativa a los que son reubicados. La idea es que ellos mediante un auto ahorro generado con su utilidad diaria reúnan un fondo para adquirir un local, comprado o alquilado, y cumplan con el proceso de formalización. Para ello el municipio los acompaña y orienta en los trámites a seguir, así como en brindarles asesoría en la viabilidad de sus ideas de negocio”, enfatizó.
Destacó que gracias a la simplificación administrativa la municipalidad está en condiciones de otorgar licencias en 24 horas cuando se trata de negocios pequeños como una fuente de soda u otros que no impliquen una actividad que cause riesgo al consumidor o al propio comerciante. El costo de este tipo de licencias bordea los 150 nuevos soles. En otros tipos de negocio el trámite dura más tiempo.
El funcionario afirmó que la meta del proceso de formalización es atender a por lo menos el 40 por ciento de los comerciantes formales (alrededor de 1,600 negocios) que presentan problemas de caducidad de sus licencias o deudas tributarias con la comuna, o que no han comunicado que su negocio ha sido traspasado a otra persona o empresa.
Por el lado de los informales, el objetivo es atender al menos al 30 por ciento de comerciantes (alrededor de 900 ambulantes).
Malásquez comentó que en el caso del expendio de comida en la vía pública, los ambulantes podrían asociarse y agruparse en ferias, buscando un local donde podrían ofrecer sin problemas sus productos.
En ese sentido, consideró que una zona por aprovechar para el negocio gastronómico ambulatorio podría ser la avenida Argentina, cerca de la zona de Las Malvinas, que ha venido consolidándose como un gran sector comercial y de masiva afluencia de consumidores.
