Cientos de miles de manifestantes salieron a las calles de varias ciudades de Yemen para expresar tanto su apoyo como su rechazo a la gestión del presidente Ali Abdulá Saleh.
En la capital, Saná, grupos antigubernamentales se reunieron cerca de la universidad, mientras que quienes respaldan al presidente se congregaron en la plaza Tahrir.
La oposición prometió movilizar a un millón de personas.