Como condena por haber violado su libertad condicional, Lindsay Lohan deberá servir 480 horas fregando la morgue de Los Angeles.
La jueza Stephanie Sautner ha condenado a Lindsay Lohan a 120 horas de cárcel y 480 de servicios a la comunidad por haber incumplido su libertad condicional, que se le impuso por conducir bajo los efectos del alcohol y las drogas.
De la prisión se ha librado tras pagar 51.000 euros, pero nadie la salvará de dedicar su tiempo libre a un buen fin. Lohan deberá “realizar funciones de limpieza y mantenimiento” en la morgue de Los Angeles,