Mientras que el mundo esta sobre lo que ocurre en Japón en Libia continuan las guerras entre el dictador libio Muamar Gadafi y el llamado grupo rebelde que pierde terreno en las contra ofensivas de los mercenarios de Gadafi.
El avance de los mercenarios y soldados a la orden de Muamar el Gadafi hacia Bengasi, el bastión de los rebeldes, parece imparable cuenta el portal El Pais. Después de someter a un duro castigo por tierra mar y aire a Ras Lanuf, la estratégica localidad bañada por el Mediterráneo que cuenta con importantes instalaciones petrolíferas, los milicianos insurgentes se han visto obligados a abandonar este enclave y replegarse hacia otras localidades costeras más al este del país, en el extremo occidental de Libia.
Mientras en Misrata otra localidad antes ocupada por los rebeldes tambien ha sido severamente atacada por los mercenarios de Gadafi cuenta Europa Press. “Están intentando entrar en Misrata, están a diez kilómetros de distancia”, ha explicado uno de los rebeldes, quien ha declarado que no les queda “otra opción más que luchar”. “Estamos escuchando bombardeos”, contaron.
Muamar Gadafi esta aprovechando los sucedido en Japón para iniciar contraofensivas en todos los frentes, afirma un rebelde a Reuters.