Lo lleva repitiendo varios días y hoy, repasando la situación de las revueltas en Libia ante el Parlamento, el ministro de Exteriores de Italia, Franco Frattini, ha hecho un llamamiento a la Unión Europea para cerrar cuanto antes una estrategia conjunta ante la posibilidad de la llegada de cientos de miles de inmigrantes huyendo de la violencia.
“Hay más de dos millones de personas provenientes del Magreb en Libia, la situación actual lleva a pensar que si sólo el 10 o el 15% de ellos decidiera cruzar el mar, Italia, Chipre y Malta sufrirían la llegada de unos 250.000 o 300.000 inmigrantes y pagarían las consecuencias”, dijo.
Por ello, Frattini ha pedido que “ningún país de la UE se vea sólo en este momento”, ya que eso significaría “la destrucción, la caída y la ruptura total de la idea de solidaridad europea que nos ha guiado en los últimos 55 años”.
Italia ha sido testigo directo de las consecuencias humanas de las revoluciones populares del norte de África. Desde mediados de enero han sido más de 5.000 los inmigrantes que se han embarcado principalmente desde Túnez para llegar a las costas de la pequeña isla siciliana de Lampedusa.
Y ante esa situación, Frattini cree que todo se puede volver a repetir. De hecho, las autoridades italianas piensan que se puede dar una situación similar al desembarco de albaneses huyendo de la guerra en los 90.
Frattini ha calificado la situación en el país de “guerra civil” y ha dado credibilidad a los datos que apuntan a la muerte de más de 1.000 personas en los ataques del Ejército y algunos grupos paramilitares de mercenarios provenientes de África que podrían estar haciendo de matones a sueldo del régimen.
Además, el ministro de Exteriores italiano ha dicho que Gadafi ha perdido el control de la región cirenaica, situada en el noreste del país.