Para el sábado 5 de Febrero la Liga por la Defensa de Inglaterra (English Defence League -EDL) convocó en Luton, la ciudad donde ésta se fundó, a la mayor marcha anti-musulmana de la historia británica. Grupos racistas de todo el país y de Europa enviaron cientos de activistas a esta urbe donde está uno de los 4 aeropuertos internacionales que rodean a Londres.
Para hacer frente a ésta, la comunidad mahometana local se congregó en una gran mezquita local, mientras que un millar de izquierdistas y sindicalistas llegaron de otras partes a la contra-manifestación de Unidos contra el Fascismo (United Againt Fascism).
Vimos ambas marchas y cómo durante el día Luton parecía una ciudad fantasma y acuartelada. Quedó vetada la venta de licor o la apertura de bares, mientras que el centro de la ciudad, que cada sábado está repleto de compradores, solo tenía tiendas cerradas o desiertas.
La policía destinó más de un millón de dólares o euros y a más de mil de sus efectivos para montar una operación como nunca antes se había presenciado en Gran Bretaña o en cualquier otra parte. Varias calles quedaron herméticamente bloqueadas por paredes metálicas móviles y por filas de uniformados acordonados o a caballo.
Gracias a ello, y sin necesidad de disparos o gases, la policía impidió que se encontraran personas que atendiesen ambas marchas, pese a que sus concentraciones centrales estuvieron a pocas cuadras de distancia y a que había grupos que fueron a buscar el choque físico.
Luton es una ciudad estratégica de casi 250,000 habitantes y cuyo aeropuerto cada año recibe 9 a 10 millones de pasajeros. Allí se inicia el río Lea que acaba en la sede de las Olimpiadas del 2,012. Esta se encuentra en el medio vertical entre las 2 mayores concentraciones urbanas de Inglaterra (Londres y Birmingham) y en el medio horizontal entre las 2 mayores universidades británicas (Oxford y Cambridge).
Luton se distingue por ser una de las ciudades más multiétnicas del país, pues posee grandes comunidades asiáticas, afro-caribeñas e irlandesas, y su carnaval, que es el mayor de un día de todo el país, está dominado por danzas sud y centro americanas.
Hace casi 2 años la EDL nació en Luton inspirada en hooligans del fútbol y en admiradores de las tropas británicas en Afganistán que salieron a contrarrestar la protesta de grupos musulmanes anti-guerra. Desde entonces este movimiento se ha ido expandiendo y ha organizado más de 30 marchas en diversas ciudades por todo el reino. Estas usualmente han generado violencia o contramanifestaciones antifascistas.
El EDL dice que no es un partido sino un frente único contra Al Qaeda, aunque sus militantes piden prohibir construir mezquitas y a la fe musulmana (que tiene 2 a 3 millones de fieles en Reino Unido).
A diferencia de los grupos neo-nazis, el EDL llama a la unidad de todas las razas (aunque, como presenciamos, casi todos los que vinieron a marchar eran varones blancos, muchos de ellos con cabezas rapadas), tienen una división judía y otra gay. El discurso final de su marcha lo dio el rabino californiano Nachum Shifren (ver foto de arriba) quien dijo que el EDL es la esperanza de Europa contra el Islam.
Esta es una nueva extrema derecha que lleva muchas banderas de Israel, que tiene lazos con alas del Tea Party y del republicanismo de EEUU y que se proclama multirracial, pero repite un elemento del nazismo: echarle la culpa de todos los problemas a una religión. La mayor minoría en Europa que rezaba en una lengua semita en la época de Hitler eran los judíos aunque hoy son los musulmanes.
Si Hitler contrató al Mufti de Jerusalén para reclutar miles de musulmanes para sus fuerzas de exterminio, el nuevo racismo emplea sacerdotes judíos o sijs contra los mahometanos.
El EDL saluda levantando un brazo (o dos), pero, a diferencia de los fascistas clásicos, no mantienen la mano extendida sino haciendo una V de la victoria. Igualmente, muchos andan enmascarados. Dicen ser anti-nazis y por eso no usan camisetas o simbología fascista, pero postulan tomar las calles para sofocar a una minoría y glorificando a una nación y a sus tropas de ocupación en otros países.
En momentos de crisis y de crecimiento de la desocupación una serie de corrientes en toda Europa viene creciendo responsabilizando al peligro musulmán de la falta de empleos, y por esa vía a todos los inmigrantes.
El EDL, si bien solo movilizó a una tercera parte de los 5 a 7 mil activistas que había prometido hacerlo, ha demostrado que es una fuerza que puede ir creciendo y terminar avanzando en sus objetivos hasta atacar también a los latinos, muchos de los cuales racialmente son similares a los mahometanos.
Pese a su poco número su influencia se ha hecho notar. En la víspera de la marcha de Luton el primer ministro David Cameron planteó el fin del multi-culturalismo británico.
Isaac Bigio