Hombres armados opositores al líder de Libia, Muammar Gaddafi, tomaron el control el domingo de la ciudad de Zawiyah, unos 50 kilómetros al oeste de Trípoli, y colocaron una bandera con los colores rojo, verde y negro de su movimiento sobre algunos edificios.
En tanto, uno de los hijos de Gaddafi volvió a negar que haya una revuelta en el país mediterráneo.
Entre tanto, la lucha entre las fuerzas de seguridad leales al líder libio y los manifestantes antigubernamentales continúa este domingo en Trípoli, al tiempo que la ciudad de Bengasi, bajo control de los manifestantes, poco a poco parece volver a la normalidad.
Los enfrentamientos se producen horas después de que el Consejo de Seguridad de la ONU votara por unanimidad la imposición de sanciones al líder libio y a su familia por la represión violenta de las protestas.
La violencia en Libia ha provocado la huida de miles de personas.
La agencia de refugiados de la ONU informó que cerca de 100.000 personas han huido a los países vecinos en la última semana.