Martes, 5 de Noviembre del 2024
Las persistentes lluvias en Brasil están retrasando las labores de rescate en el sureste de Brasil, donde las inundaciones y los deslizamientos de tierra han dejado más de 500 personas muertas.
El gobernador del estado de Río de Janeiro, Sergio Cabral, indicó que las previsiones del clima para los próximos dos días no lucían nada alentadoras.
La previsión de lluvias sobre la región serrana de Rio de Janeiro donde las inundaciones y deslizamientos han dejado miles de damnificados hace temer al gobernador por un empeoramiento de la situación.
“Lo que nos está angustiando son las próximas horas y días, pues hay previsión de más lluvia”, dijo Cabral, con base en informes del Instituto Nacional de Meteorología.
Las autoridades locales han confirmado la muerte de 538 personas en esa región del sureste de Brasil. Nova Friburgo encabeza la lista de víctimas mortales con 246, seguido de Teresópolis con 228 y de Petrópolis con 41, según cifras divulgadas por los diarios ‘Folha’ y ‘O Globo’.
Esta es la mayor tragedia natural que sacude a Brasil desde 1967 cuando unas 785 personas murieron a consecuencia de las inundaciones y los deslizamientos de tierra, según cifras de la ONU divulgadas por la prensa local.
Los bomberos no descartan que el número de víctimas en Río de Janeiro incremente a medida que vayan retirando los escombros, donde podrían estar enterrados más cuerpos.
Otros estados como Sao Paulo y Minas Gerais han declarado el estado de alerta en algunos municipios por las fuertes precipitaciones. Un total de trece personas han fallecido esta semana en Sao Paulo por los aguaceros.
