El comandante general de la Fuerza Aérea Boliviana (FAB), general Tito Gandarillas, confirmó hoy martes que en abril comenzarán a llegar al país andino seis modernas aeronaves de intercepción K8, de fabricación china, con el fin de reforzar el resguardo de la soberanía de los cielos bolivianos.
Dijo que con ese propósito un equipo de instructores, pilotos y técnicos se encuentra en China para recibir cursos de actualización en el manejo y el mantenimiento de esas aeronaves.
Señaló que el K8 es un avión de semiempleo con capacidad de interceptar aeronaves que violen los cielos de Bolivia o que circulen sin autorización, en especial aquellas que pertenecen a grupos de narcotraficantes que transportan droga.
“Inicialmente, los aviones estarán ubicados en una base en Cochabamba, pero posteriormente se ubicarán en centros estratégicos para cubrir todo el territorio nacional.”
Señaló que igualmente comenzará a funcionar la escuela para la formación de pilotos en el manejo de helicópteros, cuya base está ubicada en la población de Chimoré, en el trópico del departamento de Cochabamba.