Será un hotel exclusivo con 23 habitaciones, cuya inauguración está prevista para finales de 2011. La empresa Ivy Iternational será la encargada de renovar el edificio construido por el monarca francés Luis XIV . Esta empresa belga tiene ya otro hotel en la región de Bretaña, en el noroeste de Francia.
El edificio destinado al hotel sirvió para el control general de las finanzas desde 1723 hasta la Revolución Francesa, que puso fin a la monarquía absoluta en 1789.
El concesionario pagará el gasto de las obras, estimado en 7,4 millones de dólares. Un arquitecto de monumentos históricos, Frédéric Didier, dirigirá la renovación.
Una convención entre el ministerio de Cultura y el secretariado de Estado de Turismo, firmada en noviembre de 2009, incita a desarrollar el potencial económico y turístico del patrimonio cultural francés. Pero esta iniciativa cuenta con una fuerte oposición, que sostiene que un edificio considerado patrimonio histórico de la humanidad no debe ser utilizado con fines comerciales.
Situado a 16 kilómetros de París, el palacio se convirtió en la sede de gobierno de Luis XIV en 1682 y es considerado por la UNESCO como uno de los grandes logros del arte francés del sigo XVII. “Una habitación en este hotel deberá costar entre 1.120 y 1344 dólares“, sostuvo un vocero del Palacio de Versalles.