Casi la totalidad del nordeste de Australia está afectado por grandes inundaciones que ya dejaron varios pueblos anegados y obligaron a evacuar a más de mil personas.
La situación empeorará en las próximas horas por la cantidad de agua que hay sin drenar, advirtió la Oficina de Meteorología, que prevé que en las próximas horas el agua inunde centenares de hogares. Por eso se recomendó a los habitantes de la región que eviten las zonas bajas.
Algunas comunidades han sufrido las peores inundaciones en 50 años, y Chinchilla y Dalby, que ayer fueron declarados como zonas catastróficas, tienen únicamente agua potable para los próximos dos días.
La advertencia pesa sobre numerosas poblaciones de la zona, como Wowan, Warwick, Mundubbera, Gayndah, Alpha, Jericho, Pittsworth, Grantham, Killarney y Allora.