Los gobiernos de Nicaragua y Costa Rica seguían enfrascados hoy en una guerra verbal, en vísperas de la Navidad y al cumplirse dos meses de un diferendo por un pequeño territorio en la frontera común.
En una nota enviada la víspera por la Cancillería de Managua, el gobierno de Daniel Ortega acusó al de su par Laura Chinchilla de realizar “provocaciones” mediante la incursión de naves y sobrevuelos en la zona del sureño río San Juan.
La Cancillería respondió así una nota del Ministerio del Exterior costarricense, que a su vez negaba las presuntas incursiones de las que Nicaragua se quejó formalmente hace tres días.
El diferendo fronterizo surgió el pasado 24 de octubre, cuando Nicaragua inició un proceso de dragado del río San Juan y Costa Rica denunció una invasión militar al otro lado de la frontera.
Pese a varios intentos de diálogo, el conflicto persistió y el pasado miércoles Managua envió una “enérgica nota de protesta” al vecino país tras detectar supuestas incursiones de una avioneta y al menos dos lanchas de bandera costarricense en la zona limítrofe.
Según el gobierno de Ortega, los embarcaciones incursionaron “en aguas jurisdiccionales nicaragüenses” y la avioneta sobrevoló en dirección al Delta del San Juan “violando el espacio aéreo” de Nicaragua.
La Cancillería de Costa Rica respondió el mismo día con una nota en la que aseguró que “ninguna nave gubernamental costarricense estuvo en aguas nicaragüenses en la fecha y horas que se indican”.
Asimismo, aseguró que la nota de protesta anunciada en Managua no fue remitida por los respectivos “canales diplomáticos”, según recoge la agencia de noticias DPA.
La Cancillería de Nicaragua replicó la tarde del jueves reiterando su denuncia sobre la supuesta incursión, a la que calificó como “provocaciones” de parte de la vecina del sur.
“Nicaragua rechaza la respuesta dada por el gobierno de Costa Rica a esa nota, pues constituye una provocación adicional, ya que pretende justificar los atropellos al territorio de Nicaragua alegando una presunta ocupación militar de nuestro país, al territorio costarricense”, señaló el documento.
Recordó que el caso fue puesto en manos de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya, que fijó la primera audiencia para el próximo 11 de enero, atendiendo una demanda entablada por San José.
“Las referencias de Costa Rica a un asunto que se encuentra actualmente sometido por ella misma al conocimiento de la Corte Internacional de Justicia pone en entredicho el interés real de Costa Rica de que este asunto sea resuelto por vías de la jurisdicción internacional”, advirtió la última nota de Cancillería.
El diferendo comenzará a debatirse en La Haya, después de haber sido abordado en la Organización de Estados Americanos (OEA), cuya competencia en el caso fue desconocida por Managua.
También fracasaron varios intentos de diálogo entre Ortega y Chinchilla, porque Costa Rica condicionó cualquier reunión al retiro de fuerzas militares de la zona en disputa, y Nicaragua se negó a hacerlo alegando que los soldados están en territorio nacional.