Domingo, 24 de Noviembre del 2024
Bangkok, nov. 16. Tailandia extraditó hoy a Estados Unidos al presunto traficante de armas ruso Viktor Bout, detenido en Bangkok en marzo de 2008, informó un oficial de la policía tailandesa, citado por la agencia DPA.
Bout, de 43 años, fue llevado al aeropuerto militar Don Meuang, donde subió a bordo de un pequeño avión escoltado por seis oficiales de la agencia antidrogas de Estados Unidos (DEA), después de que el gobierno tailandés autorizara su extradición.
El abogado de Bout, Lak Nittiwattanawichan, dijo haber agotado todos los recursos para evitar la extradición y anunció que presentará una queja ante el gobierno de Tailandia.
La extradición de Bout fue confirmada por la embajada de Estados Unidos en Bangkok, que declinó hacer más declaraciones sobre el caso y no reveló a dónde será trasladado el sospechoso.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia reaccionó con duras críticas a la extradición a Estados Unidos, por parte de Tailandia, del también conocido como “mercader de la muerte”.
El ministro ruso de Exteriores, Serguei Lavrov, afirmó que la decisión de las autoridades tailandesas fue producto de una “presión política sin precedentes” por parte del gobierno estadounidense.
Lavrov, citado por la agencia de noticias Interfax, calificó de “ilegal” la extradición de Bout y consideró que, tras esta “intromisión”, conviene poner en tela de juicio la independencia del sistema jurídico tailandés.
La entrega de Bout a Estados Unidos también fue criticada por su esposa. “Todo se hizo de forma atropellada y en secreto, como lo hacen los ladrones. En esta situación, el gobierno tailandés ha actuado como una marioneta de Estados Unidos”, dijo Alla Bout.
Antes, el portavoz de la embajada de Rusia, Vitaly Anobov, había dicho que las autoridades tailandesas aún no habían confirmado a su legación la extradición del ciudadano ruso a Estados Unidos.
El supuesto traficante de armas fue arrestado en marzo de 2008 en Bangkok durante una operación organizada por agentes estadounidenses que se hacían pasar por compradores de armas para el grupo guerrillero Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
Bout, un ex oficial de la Fuerza Aérea soviética, siempre ha negado la supuesta venta ilegal de armas a grupos rebeldes en Africa, América del Sur y el Cercano Oriente asegurando que las acusaciones formuladas contra él habían sido “fabricadas totalmente por Estados Unidos”.
El presunto traficante de armas aseguraba que entre 1993 y 2001 había dirigido una empresa legal para el transporte aéreo y que decidió cerrar el negocio, porque ya no resultaba rentable.
“Todo es pura invención de Estados Unidos”, se defendió Bout de la acusaciones después de su arresto. “Nunca he traficado con armas. No hay ninguna prueba que sostenga tales alegaciones”.
El Tribunal Penal de Bangkok había rechazado el año pasado la solicitud de extradición presentada por Estados Unidos alegando que las FARC es una organización política y no terrorista.
Las leyes tailandesas impiden la extradición de personas acusadas de delitos políticos.
Sin embargo, la Corte de Apelación de Bangkok dictaminó el pasado 20 de agosto que Bout había estado involucrado en actividades criminales, allanando así el camino para su extradición.
(FIN) Agencias/LIT
