Jueves, 26 de Diciembre del 2024
El Ministerio de Energía y Minas (MEM) señaló que en la actualidad se puede observar que el agua del río Yauli ya no es contaminada con el agua ácida que antes descargaba del túnel Kingsmill debido a que la planta de tratamiento de aguas ácidas de éste, cuyo costo supera los 44 millones de dólares, ya se encuentra en etapa de prueba y descarga en promedio 1,100 litros por segundo.
“La planta de tratamiento de aguas ácidas está cumpliendo con los límites máximos permisibles que se le fijaron, es decir, está logrando el resultado esperado. La reducción que se ha logrado tanto de sólidos como de metales es muy significativa, y se aprecia que el agua de descarga ya no tiene el color amarillo que presentaba antes cuando se descargaba agua ácida”, expresó Felipe Ramírez del Pino, Director General de Asuntos Ambientales Mineros del MEM.
En ese sentido, el titular de la DGAAM proyectó que aproximadamente para el mes de mayo del próximo año, la referida planta que tiene una capacidad de tratamiento de 1,400 litros por segundo, sería formalmente recibida por la empresa Chinalco de la constructora encargada del montaje y de las pruebas.
Cabe señalar que esta planta ubicada en el distrito y provincia de Yauli de la región Junín, a 144 kilómetros al este de Lima, cuenta con canchas para almacenar la cal, pozas de secado, una sala de control de oficina y un alto nivel de automatización porque puede llegar a operarse a control remoto.
TRATAMIENTO ADECUADO
El funcionario del MEM indicó que el proceso seleccionado para el tratamiento de las aguas ácidas del Túnel Kingsmill es conocido como HDS (Lodos de Alta Densidad), el cual consiste en añadir cal al lodo recirculado en un tanque de mezcla de cal y lodo, seguido por la reacción con el agua ácida y la separación de sólidos en un clarificador.
Detalló que al combinar la cal con el agua de mina, se produce una mezcla rápida de ambos componentes, que luego va a un reactor donde en unos 30 minutos, con agitación y aire, se eleva el pH de 9.5, lo que favorece la oxidación y el precipitado de metales.
Haciendo un poco de historia, Ramírez Del Pino recordó que el Túnel Kingsmill fue construido entre los años 1929 y 1934 por la Cerro de Pasco Copper Corporation, teniendo una extensión de 14 kilómetros. Este túnel descarga las aguas del distrito minero de Morococha en el río Yauli, que posteriormente desemboca en el rio Mantaro, en la región Junín.
Entre los componentes secundarios de la planta de tratamiento, mencionó las pozas de lodos, así como la poza de emergencia, la que se utilizará cuando se realicen paradas de mantenimiento o de emergencia, disponiéndose en esta poza las aguas que no han completado su tratamiento de neutralización.
