El entrenador es acusado de instruir a sus jugadores a recibir una tarjeta roja para que estuviesen suspendidos en el siguiente juego, sin importancia para la clasificación y pasar limpios de tarjetas a la siguiente ronda.
El Comité de Disciplina de la UEFA sancionó al entrenador madridista por “conducta inapropiada”, mientras que los jugadores que forzaron la expulsión en el tramo final de dicho encuentro fueron multados: Xabi Alonso y Sergio Ramos con 20.000 euros cada uno, y los porteros Dudek y Casillas con 5.000 y 10.000 euros, respectivamente, por transmitir la orden del técnico en el campo.
Mourinho, según explica la UEFA en su página web, deberá cumplir su segundo encuentro de suspensión en un plazo de tres años si reincide en su conducta, y pagar una multa de 40.000 euros.
Asimismo, la UEFA impone al Madrid otra multa de 120.000 euros. El club blanco dispone de tres días de plazo para presentar recurso.