La salud, el sida y los derechos humanos están irremediablemente unidos y la lucha contra el virus VIH no será posible sin poner fin a la estigmatización de los portadores de esta enfermedad, dijo hoy la Organización Mundial de la Salud (OMS).
“Cualquier respuesta al VIH necesita que se garantice el respeto a los derechos humanos… El derecho a la salud es básico para actuar contra el VIH”, señaló la directora general del organismo, Margaret Chan, en una declaración con ocasión del Día Mundial contra el Sida que se celebra el 1 de diciembre.
“El miedo de ser rechazados por familiares y amigos, marginados en sus comunidades o a que se les niegue un empleo u otros servicios son razones para que la gente no se haga pruebas del sida o para que no vayan a los servicios de tratamiento”, señaló.
Chan denunció entre otras violaciones de los derechos humanos que impiden luchar contra el sida el que “en unos 80 países, las relaciones homosexuales están criminalizadas, y en 6 países castigadas con la pena de muerte”.