La votación para legalizar la marihuana en California será uno de los puntos de interés de las elecciones legislativas de EEUU del martes, en las que se renovará la Cámara de Representantes y se nombrarán nuevos senadores y gobernadores.
Comercialización del Cannabis
La llamada Propuesta 19 llegará a las urnas californianas con pocos visos de prosperar según las últimas encuestas publicadas durante el fin de semana, que indican que sólo un 42 por ciento de los electores apoyará una medida que tiene en contra a un 49 por ciento de la población.
Popular entre los jóvenes y el colectivo demócrata, la iniciativa persigue la regularización del cannabis en California y su equiparación al tabaco y al alcohol, lo que implicaría despenalizar su cultivo, comercio y consumo para mayores de 21 años en un estado donde actualmente esa droga ya es legal para uso médico.
Los defensores de la medida, entre los que se encuentran el multimillonario financiero George Soros, expertos en Derecho y economistas, argumentan que su aplicación supondría una importante fuente de ingresos para las arcas públicas y reduciría los costes derivados de los arrestos y encarcelamientos asociados al cannabis.
Aparte del cannabis, los electores estadounidenses tendrán que pronunciarse mañana sobre una variopinta lista de medidas de origen popular o legislativo que pretenden reformar las constituciones estatales. Una de las más publicitadas tiene como objetivo prohibir la ley islámica -Sharía- en Oklahoma, donde no se conocen casos de aplicación de esta norma que se practica en países musulmanes.
Su promotor, el legislador republicano Rex Duncan, defendió la necesidad de blindar la carta magna del estado frente a la Sharía después de que un juez en Nueva Jersey considerara el derecho islámico a la hora de dictar su veredicto en un caso de violencia doméstica.
En ese mismo estado se buscará aprobar en las urnas una enmienda para reconocer el inglés como idioma oficial del territorio y como el único , junto a las lenguas de los indios americanos, susceptible de ser usado por la administración estatal.
Este intento de las autoridades por afianzar el inglés ante el incremento de la inmigración hispanohablante convertiría a Oklahoma en el estado número 31 en adoptar esa resolución lingüística.
En Arizona, Tennessee y Arkansas, se votará convertir la caza y la pesca en un derecho constitucional, algo calificado de “ridículo” por quienes se oponen por considerar que son actividades lúdicas que no se encuentran amenazadas. Los defensores de la iniciativa creen necesario garantizar por ley esta tradicional forma de ocio ante posibles futuros intentos de acabar con ella por parte de grupos ecologistas.
En Colorado, los electores tendrán que posicionarse sobre los derechos de los nonatos, respondiendo básicamente a la pregunta de cuándo se considera que alguien es persona. La propuesta, promovida por grupos antiabortistas, quiere modificar la Constitución para que las leyes protejan a “todos los seres humanos desde el inicio de su desarrollo biológico“.
Por su parte, los habitantes de Rhode Island tendrán ante sí una cuestión de identidad y deberán decidir si aceptan o no modificar el nombre oficial del estado. Actualmente, este territorio es denominado en su constitución “State of Rhode Island and Providence Plantations“, y los legisladores consideran que ha llegado ya el momento de que pase a llamarse simplemente “State of Rhode Island“.
También se someterá a votación en Carolina del Norte prohibir por ley que ex presidiarios puedan en un futuro presentar su candidatura a sheriff en alguno de los condados.