Lima, oct. 04. Mañana entra en escena la obra Krapp, la última cinta, unipersonal del dramaturgo irlandés Samuel Beckett (1906-1989), estelarizada por Aristóteles Picho y dirigida por Miguel Talledo.
El argumento de la pieza es sencillo, pero de significado muy complejo: el protagonista, Krapp, cumple 69 años en completa soledad, refugiado en el vino, las bananas, sus viejos libros, evocando sus recuerdos ya un tanto difusos.
Krapp encuentra, en esta situación, una cinta de audio que hiciera en su juventud, donde se oye a sí mismo narrando historias del pasado. Así, decide grabar comentarios en lo que será su última cinta.
Esas situaciones que, aunque parezcan ilógicas, se sienten muy reales, son la clave del teatro del absurdo, del cual Samuel Beckett es la figura resaltante. Se critica a la sociedad con una visión un tanto desesperanzadora.
Sin embargo, la mezcla de sensaciones en estos montajes deja una experiencia siempre enriquecedora para el espectador.
Sobre la puesta
El versátil actor Aristóteles Picho encara esta obra con la experiencia de haber pasado por todos los géneros de la actuación, siendo su personaje una mezcla de humor con profundo drama.
Por su parte, Miguel Talledo ya había dirigido obras que arriesgan en la puesta, entre ellas, Vladimir, de Alfonso Santisteban, o Buenas noches, Mama, de Marsha Norman.