Después de un largo y accidentado proceso, la Primera Sala Penal Especial sentenció –en un acto que tiene un gran contenido simbólico y a la vez importancia histórica– a los miembros del grupo Colina. Vladimiro Montesinos, Nicolás Hermoza, Martin Rivas y Carlos Pichilingüe fueron condenados a 25 años de pena privativa de la libertad.
El juzgamiento del escuadrón de la muerte Colina, incubado en la Dirección de Inteligencia del Ejército y el Servicio de Inteligencia Nacional (SIN) durante el gobierno de Alberto Fujimori (1990-2000) y del siniestro asesor Vladimiro Montesinos, ha sido uno de los más complejos que ha debido enfrentar el Poder Judicial. Las magistradas de la Primera Sala Penal Especial –Inés Villa Bonilla, Inés Tello e Hilda Piedra– debieron enfrentar además las numerosas maniobras dilatorias de los acusados y las ofensivas políticas que buscaron quebrar el proceso, especialmente hacia el final del mismo.
La tensión se prolongó hasta el momento mismo de la lectura de sentencia. La sesión de la mañana fue suspendida y se reanudó, con una una hora de retraso a las 3 de la tarde.
La Sala Penal presidida Villa Bonilla ha registrado en miles de folios la descripción de las atrocidades que cometió el grupo Colina, y ha establecido las responsabilidades y la cadena de mando de dicho grupo. Las magistradas han encarado además, en todo este tiempo, presiones y acoso por parte de quienes defendieron dichos delitos cometidos durante el fujimorato.
Tras la derogatoria del decreto legislativo 1097 impulsado por el gobierno de Alan García, la Sala pudo al fin dictar sentencia.
FUENTE: IDL REPORTEROS