El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, ha mostrado su apoyo al presidente francés, Nicolas Sarkozy, en su política de deportaciones de rumanos y búlgaros de origen gitano. “La señora Reding -ha dicho Il Cavaliere en referencia a la comisaria de Justicia europea- haría mejor en tratar el asunto en privado con los dirigentes franceses antes que en público como ha hecho”. En una entrevista exclusiva concedida al diario francés Le Figaro, Berlusconi ha manifestado que “la convergencia italo-francesa ayudará a agitar a Europa y resolver los problemas con políticas comunes”
Algo más lejos que Bersluconi ha ido el portavoz en Bruselas de la Liga Norte, partido xenófobo aliado en el Ejecutivo italiano. “¿Cuántos rumanos acoge Luxemburgo?” se ha preguntado Mario Borghezio. “Insto a la señora Reding a que confirme o desmienta si en su país no hay campos nómadas gracias al endurecimiento de las normas de expulsión de 2008” ha declarado el portavoz de la Liga.