La amenaza de huelga era fruto de la disputa entre los equipos de la Serie A y el sindicato de futbolistas por la nueva regulación de las transferencias y el calendario de partidos, aspectos críticos que este martes quedaron casi desactivados tras un principio de acuerdo.
El secretario de la Asociación Italiana de Futbolistas (AIC), Gianni Grazioli, al término de la reunión celebrada en Roma en la sede de la Federación Italiana de Fútbol (FIGC), explicó: “El domingo se jugará regularmente. La huelga, por el momento, ha sido suspendida. Se negociará hasta el 30 de noviembre para que el presidente de la FIGC, Giancarlo Abete, garantice los dos puntos sobre los que aún no hay acuerdo”.
En el punto de mayor conflicto, los clubes pretendían en el futuro poder despedir de manera inmediata a un futbolista que se negara a ser traspasado en una operación que no supusiera un perjuicio económico ni deportivo, pero se encontraron con la rotunda negativa del gremio de futbolistas, en defensa de sus representados.
“No queremos ser tratados como mercancías”, se había quejado el jugador del Milan Massimo Oddo, en el momento que los jugadores del Calcio acordaban una huelga para el próximo sábado 25 y domingo 26 de septiembre, en caso de no resolver el conflicto.
Este martes, luego de tres reuniones sin acuerdo, se consiguió el primer arreglo al resolver el segundo punto de conflicto: La diagramación en el calendario de partidos. Los futbolistas consiguieron que no haya fútbol el próximo 6 de enero, motivo que alargará sus vacaciones de Navidad, desde el 22 de diciembre hasta el 9 de enero.