Durante su presentación, ante la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas, resaltó que el Perú optó por la afirmación de la “democracia social, realista y global”, que permite mostrar avances y logros en las metas sociales y objetivos del milenio.
En ese sentido, dijo que actualmente el país es “más estable, más independiente y más igualitario” que en el pasado, lo que otorga la capacidad de contribuir a la defensa de la libertad y la democracia, y desarrollar un rol mayor a favor de la paz, la estabilidad regional y mundial.
“Perú es uno de los países prueba del desarrollo realista y global, del desarrollo democrático y moderno, que se adhiere a una política global de mercado, con desarrollo sostenido, pero con políticas sociales que garantizan progresivamente la estabilidad y equidad entre sus ciudadanos”, dijo.
Mencionó que el país optó por el modelo de la democracia social, ejercida a través de las instituciones, y que reconoce la política de mercado y convoca a la inversión mundial con reglas claras, pero también con políticas públicas de infraestructura productiva.
“Por la democracia que no se limita a esperar el goteo hacia los más humildes, pero tampoco cae en el facilismo de subsidiar todo o aumentar los salarios públicos”, comentó.
Dijo que el Perú sigue una democracia abierta al mundo que reconoce la fuerza de la cibernética y las comunicaciones, que acepta una política global de mercado, y propone crecer hacia fuera a través de tratados de libre comercio, negociados con justicia y que preserven los derechos de los trabajadores y del medio ambiente.
“También (en) una democracia de la educación que enseñe a los pueblos que el camino del desarrollo, es el camino del esfuerzo y del mérito grupal e individual”, enfatizó.